domingo, 27 de diciembre de 2015

Pesadilla antes de Navidad


¡Hola a todos!

Hoy es domingo y vamos a hacer una reseña pero de película. Como estamos en época navideña vino a mi cabeza Pesadilla antes de Navidad así que me dije: ¡adelante!


Título: Pesadilla antes de Navidad.

Director: Henry Selick

Producida por: Tim Burton y Walt Disney Pictures.

Estreno: 29 de Octubre de 1993 en Estados Unidos.

Pesadilla antes de Navidad es un largometraje producido en stop motion, que es la técnica de animación en volumen. Es decir, toda la película fue hecha con figuras con esqueleto de metal y exterior de látex para dar la forma.

viernes, 25 de diciembre de 2015

Tesotos de infancia: Dos princesas sin miedo


¡¡Hola a todos!!

Ante todo perdón por este tiempo sin publicar, andamos casi sin tiempo y nos hemos visto muy pilladas, pero esperamos continuar manteniendo el ritmo a partir de ahora. 

Como hoy me tocaba a mi encargarme del blog tenía pensado, al fin, reseñar Amanecer rojo de Pierce Brown, pero entonces me di cuenta de que estamos en Navidad y me apetecía dejarme llevar por la añoranza. Así que el pobre Amanecer rojo queda relegado para otro día y hoy hablaré de uno de los libros favoritos de mi infancia. Así que allá vamos y... ¡¡Felices fiestas!!

jueves, 17 de diciembre de 2015

Rebelión en la granja

¡Hola a todos! Volvemos a hablar de George Orwell, pero qué queréis, me estoy convirtiendo en fanática de este hombre, ¡eso es saber escribir!

Título: Rebelión en la granja.
Autor: George Orwell
Premios: Premio Hugo, 100 mejores novelas de la Modern Library, NPR Top 100 Science Fiction and Fantasy Books 
Nº Páginas:  112

Este pequeño librito es una fábula que cuenta cómo unos animales de granja se rebelan contra su dueño, el señor Jones, ya que han comprendido, gracias a un cerdo muy querido y sabio que murió al poco tiempo, que el hombre es la causa de todos sus problemas, y que estarían mejor sin la raza humana. Tras la revuelta, serán ellos los administradores de la propiedad, siendo liderados por los cerdos, los animales más sabios. Sin embargo, no tardarán en saber que el poder puede corromper las causas más justas.

jueves, 10 de diciembre de 2015

El club de los poetas muertos

Comenzaré diciendo que hay películas que tienes que ver al menos una vez en la vida y ésta es, sin duda, una de ellas.

Encontré rebuscando por la biblioteca hace unos cuantos años el libro que se hizo de la película y me gustó tanto que me decidí a verla. Si hay libro y después película, suele ser mejor el primero (vamos, siempre); pero si hacen libro de una producción cinematográfica, claramente ésta es mejor, al menos en los casos en los que he tenido oportunidad de comparar. Podéis pasar del libro, pero la peli es inolvidable. Quien no se haya emocionado con ella o no haya aprendido alguna cosa, no tiene nada por dentro.

La historia se centra en los alumnos de una clase en una escuela privada muy prestigiosa (Welton Academy) durante 1959. En este curso conocen a su nuevo profesor de literatura interpretado por Robin Williams, cuyo objetivo no es lograr que sus alumnos estudien duramente y saquen las mejores notas como el resto de maestros, sino que aprendan a pensar por sí mismos. 

martes, 8 de diciembre de 2015

Book-tag: las enfermedades de los libros

¡Hola a todos! ¿Todo bien por ahí? Nosotras estuvimos disfrutando de un puente largo, así que estuvimos un pelín desaparecidas, pero ya hemos vuelto con un nuevo book-tag llamado "las enfermedades de los libros", que encontré en el blog Hay vida en los libros. Hoy lo haré yo solita (Arantxa), espero que no os importe. ¡Allá vamos!

1. DIABETES: un libro muy dulce.

 Por supuesto, un libro tan dulce y como bueno, ojalá pudiera encontrar en la vida real algo como lo que aparece en la novela. Estoy hablando de Charlie y la fábrica de chocolate. ¡Quiero un billete dorado!


jueves, 3 de diciembre de 2015

Nuestra Señora de París

¡Hola a todos! Hoy toca un clásico de la literatura, y me siento particularmente orgullosa de haberlo terminado, porque os adelanto que no es nada fácil.

Nuestra Señora de París, de Victor Hugo, cuenta las diferentes situaciones que viven unos personajes complejos y totalmente diferentes: Quasimodo, un jorobado deforme que vive en el campanario de Notre Dame, el archidiácono Claude Frollo, padre adoptivo de Quasimodo, Esmeralda, una joven gitana que ayuda a Quasimodo en un momento traumático de su vida, y el capitán Febo, un mujeriego empedernido que no dudó en conquistar a Esmeralda desde el primer momento en que la vio.

martes, 1 de diciembre de 2015

Pensando en ti

¡Hola a todos y feliz martes! 

Hoy tenemos algo un poco especial y es que en vez de hacer algún book tag u otras entradas que tenemos en mente, hemos decidido colgar un pequeño relato. ¡Esperamos que os guste! Se titula "Pensando en ti".



El sol entraba a raudales por la ventana cuando despertó. La luz era dorada, luminosa, de un tono cálido y liviano. Hacía que se hiciera feliz. Le gustaba la luz de la primavera. Era fresca, juguetona y creaba sombras mientras se escondía entre los pliegues de las nubes. La primavera era su estación favorita y su luz siempre era perfecta. Le recordaba al sabor de las naranjas y a la viveza de los dientes de león que florecían en el parque bajo su ventana.

Javier se levantó de la cama. Quería moverse y sentirse tan vivo como el aire aunque le gustaba remolonear entre las sábanas calientes y fingir que aún no había despertado. Dejar que los sueños durasen un poco más. Javier creía en los sueños más que nadie. Creía con ferviente fe porque su alma sabía que los sueños se cumplían si eras lo suficientemente valiente para buscarlos.

Desde pequeño se dedicaba a cazar sueños. Ponía su corazón en ellos, se entregaba por entero y a veces, no siempre, los sueños se dejaban atrapar por él. Era como formar parte de un club selecto dedicado a averiguar secretos y a descubrir sus maravillas. El niño que había en él se deleitaba con cada misterio. Siempre le sabían a algodón de azúcar y especias dulces.

El olor del café recién hecho terminó por despabilarle. Acercó la taza verde a los labios inspirando profundamente y dando un largo sorbo. A veces le parecía muy fácil ser feliz. No necesitaba grandes cosas, solo placeres sencillos y cotidianos. Una vieja taza de café, sábanas calientes, el sonido de una guitarra y una sonrisa. Javier amaba las sonrisas.

Sus labios sonrosados formaron una sincera y amplía curva al escuchar el ruido dulce que provenía del salón. Sin prisa, llenó otra taza, esta vez con chocolate, y dejó que se calentara antes de cruzar el pasillo llevado por la música. Movía los pies a su ritmo y de vez en cuando taconeaba sobre la colorida alfombra.

Su sonrisa se hizo más amplia al entrar al salón. Donde debía estar el largo sofá negro solo había papeles. Decenas de partituras las unas sobre las otras amontonadas y en desorden. En la mesa de caoba, los últimos restos de un abundante desayuno que no había recibido clemencia y repartidos por el suelo, aquí y allá numerosos cojines grises que contemplaban como aquellos dedos largos, delgados y ágiles rasgueaban las cuerdas con una púa blanca. Ella era delicada en cada movimiento que desprendía elegancia mientras los ritmos se deslizaban con la fluidez de un río, mansa y quedamente en algunos tramos y restallando de vivacidad en los tempos rápidos. Javier contempló la habitación desde el quicio de la puerta sin hacer ruido, sin interrumpirla. Era su música lo que más le cautivaba, aquella belleza naciendo del desorden. 

Porque aquella mujer era un caos. Pero era su caos favorito.

Estaba justo bajo el ventanal donde la luz de la primavera caía hasta descansar sobre el cabello castaño, largo y liso, que tanto le gustaba acariciar. Ella dejó de tocar y las vibraciones de las últimas notas flotaron en el aire hasta desaparecer. Miró la púa que descansaba entre sus dedos, la misma que Javier le había regalado y sonrió, una sonrisa amplia y sincera. Murmuró para sí las palabras que estaban grabadas en ella con letra azul y Javier supo que en su cabeza escuchaba la canción que más amaba. Aquella a la que hacía referencia y siempre sonaba en sus aniversarios.

"Pensando en ti"

Ella giró la cabeza para mirarle al captar el aroma del chocolate y su sonrisa se profundizó con un brillo de alegría que desprendía de sus ojos de color miel.

Ella era como la primavera. Ella era su caos. Era el último sueño alcanzado, no tenía que buscar más. Javier por fin tenía un hogar dorado y luminoso. Uno del no que se cansaría jamás. Acercó la taza roja con el chocolate y se sentó junto a ella, besando la frente despejada. Ella dio un largo sorbo al dulce y sus labios pidieron silenciosamente un beso. Rodeados de partituras, de sueños cumplidos y de sonrisas brillantes se encontraron el uno al otro con la luz de la mañana de único testigo. La felicidad tenía un nombre. El más bonito y hermoso de todos.

Helena. 



Este ha sido el relato. ¿Qué opináis? ¿Os ha gustado? Aceptamos todo tipo de sugerencias y esperamos que lo hayáis disfrutado. ¡Feliz martes!

MJ