viernes, 16 de noviembre de 2018

Geralt de Rivia y su Último deseo

¡Hola a todos!

Llega el día de volver a la carga con el especial de Geralt de Rivia. Comenzó el miércoles pasado en el que traté por encima, rasgos del worldbuilding y el orden de los libros publicados. Si tenéis curiosidad podéis echarle un vistazo aquí. Soy pesada, pero lo hago desde el cariño.

Dentro del especial, hoy es el día más especial porque puedo hablaros directamente del personaje (que no es el único que mola), no pierdo más el tiempo:

 ¡allá voy!



Primero os cuento un poco de su historia. Os había dicho que Geralt fue entrenado como brujo, es decir, como un profesional mata-monstruos; lo que me guardé el miércoles es que los brujos no son nada apreciados en ese mundo, se les considera casi monstruos en sí mismos y eso tiene mucha influencia en el personaje. Alguien que, desde niño, es entrenado como un arma de matar, que arriesga su vida cada día por ganarse el pan y que pocas veces encuentra agradecimiento ni un trato de igual entre la gente.

Los brujos, a parte del entrenamiento físico, se someten desde la infancia a la Prueba de hierbas, que es secreta y la mayor parte de las veces mortal. Geralt demostró una gran resistencia a estos venenos y pócimas, por lo que fue sometido a un tratamiento experimental junto a otros niños. Fue el único superviviente y, a parte de recibir facultades físicas sobre humanas, encaneció su pelo dejándolo blanco.

¿Alguien se ha preguntado porque pongo imágenes de lobos blancos para marcar las partes de las entradas? Pues porque uno de sus apodos (tiene unos cuantos) es Lobo blanco debido a su cabello.

¡Sorpresa! ^^

Es una tontería, pero me hacía ilusión el detalle (no me juzguéis... demasiado); prosigo.

¿Qué podemos esperar del personaje? Podemos esperar una persona endurecida, a nivel emocional y físico (tantos años de peleas, trabajo desagradecido y bestias que desean rajarte el cuello... y humanos que no andan muy alejados de ese deseo), tiene que haber muchas cicatrices y malos recuerdos sí o sí.

Mirada dura, oscura, cabello blanco pese a no ser viejo, dos espadas, una para los humanos y otra de plata para los monstruos. Aspecto circunspecto, retraído, callado, certero. Geralt tiene una personalidad cínica pero no chulesca. Cree en las fuerzas de la naturaleza pero no en las del destino.

Es un personaje complejo; no es un héroe pero sí un luchador que sobrevive. Como detalle tonto (¿a quién no le gustan?), todos sus caballos reciben el nombre de Sardinilla.

¿Y qué más personajes podemos encontrar?

Una de las figuras más relevantes es Yennefer, una hechicera considerada poderosa y bella, y el gran amor de su vida. Uno de esos amores conflictivos de, ni contigo ni sin ti. Yennefer tiene el cabello negro, ojos violetas y uno de sus rasgos más característicos es su perfume a lilas y grosellas. No es una muchacha indefensa ni un personaje simple.

Otro de los papeles más esperados (al menos por mi parte) es Jaskier. Es un trovador, un don Juan que siempre se mete en problemas, descarado, alegre y embaucador. Es gracias a sus composiciones por lo que son conocidos los sucesos de la saga, ya que sus canciones fueron muy alabadas.

Pasamos al último personaje del que voy a hablar, Cirilla de Cintra. Ciri tiene relación con el destino y en específico, con el destino de Geralt. La conocemos desde niña gracias a los relatos, pero la evolución que tiene en los libros es brutal e impresionante. No es un personaje que tomar a la ligera, es peleona y dura, fuerte; una superviviente.

¡Que ganas tengo de verlo todo en la pantalla! Y ya que estamos, que Sapkowki me firme los libros.

El miércoles os prometí una pequeña reseña de El último deseo, así que allí voy.


El libro consta de seis relatos hilados por pequeños interludios en tiempo presente que se titulan La voz de la razón.

Los relatos son:

-El brujo.
-La semilla de la verdad.
-El mal menor.
-Cuestión de precio.
-El confín del mundo.
-El último deseo.

En todos ellos hay coherencia de estilo y personajes, así como temática e influencias. En El mal menor, por ejemplo, seguro que hay ciertas cosas que os suenan a Blancanieves pero... madre mía con la historia de Blancanieves, más bestia, más real. Otra cosa a añadir, que también marca diferencia con otras obras más clásicas de fantasía de corte épico, es que aquí predominan los grises en los actos, las decisiones y los sucesos. ¿Los personajes se equivocan? Por supuesto, puedes estar de acuerdo con ellos o no, pero se equivocan por razones humanas, a veces por hacer lo correcto o a veces por egoísmo. Al final, nunca te genera la idea de "esto era lo correcto" sino que consigue darte la misma duda que con la realidad o, marcarte en el posicionamiento.

Estos relatos, como os decía, funcionan como introducción, e incluso, como lectura independiente; plantea las semillas de lo que ocurrirá. Son perfectos tanto si solo sentimos curiosidad como si queremos hundirnos en todo lo que Sapkowski nos ofrece.

Por mi parte solo me queda recomendarlos porque son una buena lectura y también, porque fueron importantes para mí en mi vida lectora. Fue un antes y un después.

¡Espero que os haya gustado! El domingo le toca el turno a las adaptaciones... y tiene tela.

MJ

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